Cuando reseñamos UNA NOCHE. El hombre lobo, dije que la follonera era un rol que añadía demasiado caos para mi gusto y que por ello no solemos jugar con ella. Hola, follonera. Hoy te he traído aquí para pedirte disculpas.
¿Para esto interrumpes mi programa de la Sexta?
Vaya, disculpas otra vez. He de decir que tras haber jugado contigo como rol en UNA NOCHE. El hombre lobo. la situación cambia mucho, eres muy necesaria.
Eso siempre lo he sabido.
La estrategia más básica que se puede hacer contigo es fingir que has cambiado los roles de dos jugadores, esperar a que alguno de ellos confiese ser lobo (para hacer pagar al supuesto verdadero lobo) y luego decir que realmente a quien cambiaste fue a otros, de tal manera que el lobo se acaba de delatar públicamente.
Lo sé, lo sé, es mi trabajo.
Pero claro, también sirves como defensa. Cuando un hombre lobo ha sido acorralado, su compañero puede ayudarlo fingiendo ser follonera y haciéndole pagar el pato a otro jugador.
A mí me lo vas a contar. ¡Menudo follón!
La cuestión fundamental es que tu mera presencia hace que no se puedan sacar conclusiones definitivas muy precipitadamente y lo mejor de todo, ¡la cara que se le queda a la gente cuando les cambias los roles y ganan sin querer!
Jijijijiji.
[…] Virus!: rimarreseña, Blood Bowl: Team Manager, equipos mejorados, Disculpas públicas a la follonera, Imperial Assault: diario de campaña (I), Dragón vs Dinosaurio, Mix It: Pulpín, Rigodón y […]